domingo, 16 de diciembre de 2007

De Rojo...





Con mi última lágrima
contaminaré tu recuerdo
y mancharé tu nombre...


... es hora de renunciar
para no desvariar

7 comentarios:

La_EsPeCtAdOrA dijo...

hay renuncias ke desvarian..

Unknown dijo...

el resto de la vida no me sera suficiente para poder comprender como haces...

tanto sentimiento y tanto que decir resumido en tan pocas palabras...

asi como a veces debemos aceptar, otras tantas debemos renunciar, mas no es una renuncia por derrota, sino cerrar una puerta sabiamente, para no sufrir con tanto y tanto...

siempre lo he dicho y sigo insistiendo: tu forma de ordenar las palabras de modo que pocas digan tanto siempre me ha cautivado, y siempre lo hara...

Josemy dijo...

Cielo, ojalá todo te salga bien, y recuerda que siempre me tendrás aquí para ayudarte...

Sólo, te puedo decir, que ojalá no tuvieras que derramar ni una sóla lágrima...

El Ángel del Dulce Dolor dijo...

Bueno, al menos si no es una renuncia por derrota, las lágrimas son un poquito menos amargas. Espero que todas las lágrimas que te queden por llorar las provoque la felicidad.

Ricardo J. Román dijo...

Hola Dama de Cristal.

Me ha fascinado tu blog. Eres una de las pocas bloggeras que escribe cosas tan cortas y me han llegado.

Excelente post este.

Sin aliento.

Cuando alguien ha de renunciar a algo, debe hacerlo sin pensarlo mucho.

Besos.

Anónimo dijo...

Si las palabras de la poesía, no fueran más que eso, palabras.

si no fueran más que rimas mal gastadas y pensamientos efímeros.

si la palabras fueran más que eso,
te escribiría poemas infinitos.

Pero te digo, ¿te darás por vencida como lo hice yo? ¿para que termines escribiéndole poesía al recuerdo y a la soledad mientras te fumas un cigarrillo? No... no mi dama de cristal...

a las damas no hay que hacerlas llorar.

un beso
hannibal

La Dama de Cristal dijo...

Y a veces renunciamos porque desvariamos. Tienes razón espectadora...

Trato de escribir o mas bien poner sentimientos mezclados en un puño de letras juntas. Vivamos no comprendamos mi leal Penumbra...

Gracias dulce pena, igual cuentas conmigo y pues bueno las lágrimas nos hacen sentir vivos y más cuando son por sentimientos tan fuertes como el dolor...

Bien lo dijiste ángel del dulce dolor no es por derrota la renuncia. Son tan dulces las lágrimas por felicidad.

Brincar sin pensar Ricardo y no quedarse en el medio... hacerlo de un solo. Gracias!

No me daré por vencida como se que vos no lo haz hecho... no quiero escribirle al recuerdo y a la soledad, aunque muchas veces en soledad y entre recuerdos escribo... no quiero encender más cigarrillos y no mi querido Hannibal un caballero no hace llorar a una Dama. Gracias por tus visitas te extrañaba como extraño tus palabras hechas poesía, nunca mal gastadas siempre melodías...

Besos!!!